En tu libro estaban escritas todas aquellas cosas

“Mi embrión vieron tus ojos,
Y en tu libro estaban escritas todas aquellas cosas
Que fueron luego formadas,
Sin faltar una de ellas.”

-Salmos 139:16 (RV1960)

Dios es Omnisciente

El clamor de adoración de David era:

“Tal conocimiento es demasiado maravilloso para mí; Alto es, no lo puedo comprender” -Salmos 139:6 (RV1960)

¿Por qué razón? David veía de Dios sus verdaderos atributos. En esta porción se da a conocer su Omnisciencia. Esto quiere decir que Dios ya todo lo sabe. Él no aprende nada nuevo. Él todo lo conoce todo el tiempo. El conoce también todo sobre tu vida.

Para David, Dios lo ha:

examinado

conocido

entendido

escudriñado

rodeado

Dios conoce tu actividad y tu descanso, lo íntimo de tus pensamientos, toda tu vida. Y es ante esto que dice el salmista:

“Tal conocimiento es demasiado maravilloso para mí; Alto es, no lo puedo comprender.”

Dios es Omnipresente
Para Dios no hay ningún lugar en donde su presencia no pueda existir. Él no está limitado por razones de tiempo ni espacio. Este es su atributo de Omnipresencia.

David preguntaba:

¿A dónde me iré de tu Espíritu? ¿Y a dónde huiré de tu presencia?

-Salmos 139:7 (RV1960)

Y la respuesta es: A ningún lugar. El salmista dice que pudiera encontrar a Dios en:

los cielos

en el Seol

en el extremo del mar

en el día

en la noche

Para Dios no hay nada encubierto, y ningún lugar en donde estés es una limitación para la presencia de Dios.

Dios es Soberano
Reconocer la soberanía de Dios descrita en la Biblia trae un reconocimiento regenerado y restaurador.

David lo describe aquí de la siguiente manera;

“Mi embrión vieron tus ojos, Y en tu libro estaban escritas todas aquellas cosas que fueron luego formadas, sin faltar una de ellas” -Salmos 139:16 (RV1960)

Nuestra naturaleza muchas veces se resiste a la idea de que Dios gobierna sobre todo. Nuestra mente se ve limitada para entender la realidad del asunto. Todo fue escrito desde la eternidad. Todos los detalles de los días estaban escritos desde la eternidad. Y Dios los escribió antes de ser formados. ¿Conoces al autor de la vida? No faltará nada de lo que está escrito allí que no venga a suceder en el tiempo y el espacio. ¡El autor de la fe es el autor de tus días! Cuánta bondad Dios derramó para ser experimentada, para andar en las obras que él ha preparado de antemano y vivir a la imagen de su Hijo. Y sin embargo, ¿quién se podrá resistir a esto? Quedará hasta no poder luchar y sin ganarle a esta maravillosa revelación divina.

El salmista queda como en una Epifanía con esta revelación dada por el Espíritu cuando dice : “¡Cuán preciosos me son, oh Dios, tus pensamientos! ¡Cuán grande es la suma de ellos!”

Resuenan estas palabras a la experiencia en el Nuevo Testamento cuando Pablo, indagando en sus misterios, exclamaba a toda capacidad:

“¡Oh profundidad de las riquezas de la sabiduría y de la ciencia de Dios! ¡Cuán insondables son sus juicios, e inescrutables sus caminos! Porque ¿quién entendió la mente del Señor? ¿O quién fue su consejero? ¿O quién le dio a él primero, para que le fuese recompensado? Porque de él, y por él, y para él, son todas las cosas. A él sea la gloria por los siglos. Amén.”

Romanos 11:33-36 (RV1960)

Quiera Dios que tu alma se excite y se propulse a adorar a Dios cuando contemples sus atributos inmutables, cuando veas su poder y cuando conozcas su dictadura amorosa. De otra manera te endurecerías y te rebelarías ante un Rey del cual no podrás escapar.