Sermón: Romanos 16:27 Los Atributos de Dios: Perfecto en Sabiduría (6 de 10)

Romanos 16:27 “al único y sabio Dios, sea gloria mediante Jesucristo para siempre. Amén.”

 

            La semana pasada estuve con Irma en la playa de Jobos, cerca de las cabañas de Hau. El día estaba precioso: claro, fresco, ventoso. Y el agua tenía un color bello: era un azul verdoso. Verdaderamente espectacular. Merecía un momento Kodak.  Parecía de postales.

            Y hace poco estuvimos en Orocovis, en el miradero. La vista era espectacular. Valía la pena estar allí y venir desde Isabela para contemplar las cosas hermosas que hay en Puerto Rico. Podíamos habernos quedado horas contemplando la hermosura de la creación.

            Verdaderamente podemos decir con el salmista en el Salmo 104:24 “¡Cuán innumerables son tus obras, oh Jehová! Hiciste todas ellas con sabiduría; La tierra está llena de tus beneficios.” Todo lo que Dios ha hecho lo ha hecho con sabiduría. ¿Por qué? Porque Dios es sabio. Más aún, Él es el único sabio Dios. Romanos nos dice que por el hecho de que Dios es el único sabio Dios El merece ser adorado. Entonces, su sabiduría nos debe llevar a admirarlo, buscar de Él la sabiduría que necesitamos y confiar plenamente en todo lo que Él hace en el mundo y en nuestras vidas. 

            Ahora bien, ¿qué significa que Dios es sabio? ¿Y que todo lo que Él hace en el mundo es hecho con sabiduría? Significa que…

I. Dios siempre escoge los mejores fines posibles

            Todo lo que Dios ha planificado tiene un fin que no puede ser mejorado. Todo lo que Dios se propone hacer es lo mejor que debe ser hecho. El no actúa alocadamente. Él tiene un fin claro, definido y que es el mejor fin entre otros fines. Su propósito al hacer las cosas en el mundo y en nuestras vidas es perfecto, porque son hechas en sabiduría. Él es el único sabio Dios.

            El fin último por el cual El hace todas las cosas es su propia gloria. Mejor fin no puede haber. Así como el fin principal de todo ser humano es el de glorificar a Dios. El fin último de Dios al hacer todas las cosas es buscar su propia gloria.

            Pero aparte de ese fin último, Dios tiene otros fines secundarios. Aun estos fines secundarios, subordinados al fin supremo, son los mejores fines que pueden existir. Mira el ejemplo de Job. El fin último en todo lo que le sucedió a Job lo fue la gloria de Dios. Pero, hay otros fines secundarios. Dios buscó probar la fe de Job. ¿Con qué fin? Con el fin de que descubriera cuán frágil es él, con el fin de fortalecer su fe, confirmarlo, entre otros fines o propósitos. Dios no saca nada de la manga. El no improvisa. ¿Por qué? Porque Él es sabio e infinito en su entendimiento. Salmo 147:5 “Grande es el Señor nuestro, y de mucho poder; Y su entendimiento es infinito.” Él sabe lo que hace.

            Porque su entendimiento es infinito El conoce todas las cosas. El conoce todas las cosas que son posibles en la vida. Por lo infinito de su entendimiento El conoce todas las posibilidades. Pero Él también sabe todas las cosas que son y las que serán. El futuro es desconocido para nosotros, pero no para Él. Dios conoce el futuro porque Él lo ha decretado. Él lo ha planificado. Por tanto, el fin último y los fines secundarios son los mejores que pudo haber escogido. Y yo te pregunto: crees esto. ¿Crees que todo lo que Dios ha planificado en el mundo y en tu vida ha sido planificado sabiamente por Dios? Nada de lo que sucede en tu vida está fuera el propósito de Dios. Absolutamente todo está bajo el propósito de Aquel que hace todas las cosas según el designio de su voluntad, incluso el permitir nuestros pecados. No para justificarlos sino misteriosamente para su gloria.

            ¿Qué significa que Dios es sabio? Significa que…

II. Dios siempre escoge los mejores medios para lograr sus fines

            Dios no solo escoge los mejores fines que puedan existir sino también escoge los mejores medios posibles para alcanzar sus propósitos. Todo es hecho de una manera armoniosa. Dios es el único sabio en el mundo. 

            Por ejemplo, Dios determinó que el mejor medio para probar a Job lo era por medio de Satanás. Impresionante. Para nosotros parece increíble. Para nosotros eso es incomprensible que Dios utilice incluso a Satanás para llevar a cabo su propósito sin que Dios se contamine con el uso de ese terrible instrumento que es Satanás. Hermanos, Dios es sabio en lo que hace y en cómo lo hace. Para nosotros es incomprensible, pero no para Dios. ¿Por qué? Porque sus pensamientos son superiores a los nuestros. Dice Isaías 55:8-9 “Porque mis pensamientos no son vuestros pensamientos, ni vuestros caminos mis caminos, dijo Jehová.
Como son más altos los cielos que la tierra, así son mis caminos más altos que vuestros caminos, y mis pensamientos más que vuestros pensamientos.”

            Hermanos, en nuestra vida hay muchas cosas que no podemos entender. Es normal que sea así. Ninguno de nosotros es Dios para comprenderlo todo exhaustivamente. Solo Dios posee tal conocimiento. Pero tenemos que entender que Dios es sabio en todo lo que Él hace y permite que suceda en nuestra vida y en lo que hace en el mundo.

            Ayer estaba leyendo que el actor español Antonio Bandera había sufrido un ataque al corazón el 26 de enero de este año. Él tiene 56 años. Pero esto que parece terrible y lo es le sirvió a él de lección. Dijo él: “he venido castigando mi cuerpo por 37 años porque soy un adicto al trabajo”. Su cuerpo le pagó la factura. Su cuerpo le estaba diciendo esa no es la mejor manera de tratarme y este es el resultado. Ahora aprendió a cuidarse como debía. Tuvo que pasar una experiencia así para que recapacitara. Para que pusiera su vida en orden.

            En la vida de nosotros Dios hace eso y mucho más. Sabes porqué, porque el fin de lo que Dios hace en nuestra vida y en el mundo es el mejor fin posible. Y los medios, la manera en que Dios hace lo que hace es revestido de sabiduría. Por tanto, por qué dudar lo que Dios hace. Él sabe lo que hace. Él sabe el por qué lo hace de esa manera.  Y en esto no debemos dudar.

            A Dios no tenemos que darle el beneficio de la duda. Todo lo que Dios hace es fundado en sabiduría. Ese es el testimonio de toda la Biblia.

            Job 9:4 “Él es sabio de corazón, y poderoso en fuerzas; ¿Quién se endureció contra él, y le fue bien?”.

            Job 12:13 “Con Dios está la sabiduría y el poder; Suyo es el consejo y la inteligencia.”

            Salmo 19:7 “La ley de Jehová es perfecta, que convierte el alma; El testimonio de Jehová es fiel, que hace sabio al sencillo.”

            Apocalipsis 7:12 “La bendición y la gloria y la sabiduría y la acción de gracias y la honra y el poder y la fortaleza, sean a nuestro Dios por los siglos de los siglos. Amén.

            En la creación, en la providencia y gobierno del mundo y en nuestra salvación Dios revela su sabiduría. Por tanto, Dios merece toda gloria. Como dice Pablo en Romanos 11:33-36 “¡Oh profundidad de las riquezas de la sabiduría y de la ciencia de Dios! ¡Cuán insondables son sus juicios, e inescrutables sus caminos! Porque ¿quién entendió la mente del Señor? ¿O quién fue su consejero? ¿O quién le dio a él primero, para que le fuese recompensado? Porque de él, y por él, y para él, son todas las cosas. A él sea la gloria por los siglos. Amén.”

 

Aplicación:

1. Proverbios 3:5-8 “Fíate de Jehová de todo tu corazón, Y no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo en todos tus caminos, Y él enderezará tus veredas. No seas sabio en tu propia opinión; Teme a Jehová, y apártate del mal; Porque será medicina a tu cuerpo, Y refrigerio para tus huesos.” Que es lo que dice Proverbios. Nos dice cuatro cosas:

            1. Cree.  Confía plenamente en Dios, de todo corazón, no parcialmente, ríndete completamente a Él. No descanses en tu aparente sabiduría. No te creas sabio, reconoce tu debilidad y el hecho de que por naturaleza no somos sabios. Aprende a desconfiar en ti.

            2. Ora. Pon todos tus planes delante de Él. Antes de cada plan lleva a Dios en oración. Pregúntate si lo que haces está basado en la voluntad de Dios. Porque si no lo está, no disfrutarás de la bendición de Dios.

            3. Agradece. Confía que en lo que no sabes que deparará del futuro has puesto tus planes en sus manos y El pondrá en orden todas las cosas.

            4. Humilde sumisión. Teme a Dios, busca agradarle en todo lo que haces, vive para Dios y conságrate a Él, apártate del mal.

            5. Cosecha. Y si haces esto recuérdate que si así vives esto te dará aliento para seguir adelante y sanará los males en tu vida. Esa es la verdadera terapia que necesitamos. La salud mental depende de una vida en obediencia a los mandamientos de Dios.

            Quiera Dios que nosotros creamos y descansemos en el hecho de que Dios es sabio en este universo y admiremos su sabiduría, la busquemos de Él y adoremos al único sabio Dios con un corazón que confía plenamente en El para siempre.